Al igual que el resto de las becas Progresar, hay un beneficio progresivo a medida que se avanza en la carrera. En primer año, percibirán $5.316, en segundo $6.379 y para los estudiantes de tercero y cuarto el beneficio llega a los $7.442. En todos los casos, el pago comprende diez meses, desde marzo hasta diciembre.
Hasta el año pasado, se pedía un promedio de 8 en la secundaria, aunque lo consideraban "inexacto” debido a la variedad de niveles que presentan las escuelas. La novedad de 2018 es que, por primera vez, se tomará una prueba estandarizada a los ingresantes. Será el 12 de abril en simultáneo en las 24 jurisdicciones y evaluarán conocimientos de lengua y razonamiento lógico.
El examen incluirá, además, un cuestionario complementario para medir "la inclinación hacia la docencia” diseñado por psicometristas. En un mes, cuando se conozcan los resultados, el rendimiento académico pesará en un 60%, el compromiso por la profesión en un 20% y la condición socioeconómica en otro 20%. Hoy ya hay 12 mil inscriptos, aunque -aclaran- muchos no cumplen con los pre-requisitos.
Por su parte, los estudiantes avanzados tendrán que haber aprobado al menos el 20% de las materias de cada año para postularse. En ningún caso los ingresos de los beneficiarios pueden estar por encima de tres salarios mínimos vitales y móviles y la inscripción se hace online.
Una vez superado el proceso de selección, los estudiantes que gocen de la beca deben certificar sus avances para no perder el beneficio. En segundo año, deben tener el 20% del plan de estudios superado, en tercero el 40% y en cuarto el 60%. Como excepción, si un alumno termina el cuarto año sin graduarse, con el 90% de la currícula aprobada, puede acceder a un estímulo económico para terminar la carrera.
Además, se comprometen a participar en capacitaciones, tutorías y a firmar un documento, en caso de que la provincia así lo necesite, de que una vez egresado ocupará una vacante.
Cada provincia tiene una determinada cantidad de becas a disposición según las necesidades. Las carreras estratégicas también fueron elegidas de acuerdo a las vacantes. En el listado, las que más aparecen son Química, Física, Inglés e incluso Música. "Música, por ejemplo, tiene bajas tasas de egreso porque exige dominio de ciertos instrumentos que la hace selectiva. Algo semejante ocurre con inglés”, explicó Veleda. La Ciudad de Buenos Aires, debido a su falta de maestros, considera ocho profesorados como necesarios.
Fuente: Infobae
*Si te interesa estos temas y quieres aportar o comentar en InterUniversidades regístrate aquí: Registrarme