Éste es uno de los eternos debates entre los estudiantes, ¿es mejor estudiar de noche o estudiar de día? Cada alternativa tiene sus fieles defensores que te hablarán y tratarán de convencerte sobre las ventajas de cada opción.
La realidad es que cada persona es un mundo y no hay ninguna mejor alternativa probada científicamente. Hay personas que rinden más de noche y otras que lo hacen durante la mañana o la tarde. Sin embargo, reflexionando sobre las razones objetivas sobre la mejor franja horaria para estudiar, hemos descubierto los siguientes beneficios para cada una.
Posiblemente haya más razones por las que cada una de estas opciones es beneficiosa para ser más productivo en los estudios. Sin embargo, lo que sí es cierto es que cada persona es diferente y lo importante es que optes por la opción que mejor se adapte a ti.
Si tras este repaso de ventajas e inconvenientes te has decidido por la noche, aquí te traemos 6 consejos que harán tus noches de estudio más llevaderas:
#1 Establece una rutina: Si decides estudiar por la noche, no lo hagas de forma esporádica. Establece una rutina de estudio nocturno todos los días; de esta forma tu cuerpo se acostumbrará a ello y podrás sacarle más rendimiento. En cambio, si a veces estudias por el día y otras por la noche, tu cuerpo se volverá loco.
#2 Descansa durante el día: Estudiar de noche no debe ser sinónimo de dormir menos. Descansar bien es uno de los puntos clave para el éxito en los exámenes. Por tanto, si estudias de noche, duerme durante el día.
#3 Iluminación: Que estudies de noche tampoco significa que estudies medio a oscuras. Debes cuidar tu zona de estudio e iluminarla correctamente. Una luz poco intensa puede ser dañina para tus ojos, sin mencionar que tu estudio se verá resentido y que existen más probabilidades de que te entre sueño.
#4 Controla el tiempo: Cuando nos ponemos a estudiar durante la noche, corremos el riesgo de perder la noción del tiempo. Por tanto, de noche más que nunca, es importante que controlar y planificar el tiempo para dividir nuestro estudio, pero también para establecer descansos. Descansar e hidratarse cada hora y media, aproximadamente, es muy recomendable.
#5 Música para inspirarte: Ya hemos mencionado que una de las ventajas de estudiar de noche es la creatividad. Muchos creen que por la noche se tiene más pronunciada esta virtud que en el resto del día. Por ello, muchos artistas trabajan durante la noche.
Una buena idea para favorecer esa creatividad puede ser estudiar con música que nos inspire y nos ayude a pasar la noche.
#6 Organiza un grupo de estudio: Otra de las características de estudiar de noche es que las bibliotecas están semi-vacías por lo que corremos el riesgo de sentirnos un poco solos. Además, la mayoría de nuestros compañeros y profesores estarán durmiendo, por lo que si tenemos una duda, puede que no encontremos a quién preguntársela.
Para superar estos retos, es recomendable buscar compañeros con hábitos de estudio nocturnos para organizar un grupo y estudiar juntos. Puede ser en una biblioteca o a través de grupos On line.
¿Eres un estudiante nocturno? ¿Qué otros consejos darías para estudiar de noche?
Comparte: